Aún siendo cliente asiduo de este maravilloso local, no deja de sorprenderme la calidad de sus "platillus". Hoy la opción ha sido un rabo de buey guisado con vino del Priorat acompañado de patata confitada, que es, sencillamente, genial: carne melosa, patatas en su punto, salsa estupenda… se nota! que han evolucionado el concepto de este guiso!!
El vino, un Ribera Duero (Arzuaga Crianza 2013) que acompañaba a la perfección la potencia del "platillu"
Lugar acogedor, servicio esmerado y atento, calidad de la materia prima dan como fruto unos platos fuera de lo común, donde calidad y presentación conjugan a la perfección con el maridaje de la diversa oferta de caldos que nos ofrece el equipo de "El Vi de Deu" (especialmente el propietario, Jordi).